Un año después, me doy cuenta de que ha pasado más de un año. Me doy cuenta de muchas, muchas cosas. Recuerdo errores, despistes, cambios, cosas que no eran tan importantes, miedos, palabras que hirieron, silencios que no deberían haber sido, lágrimas que sobraban, otras que hacían falta...
Y también noches maravillosas, mediodías soleados aun cuando las nubes eran más que grises, mañanas de sueño y alegría, cenas divertidas, bromas absurdas, mundos nuevos, ilusiones, sueños, confidencias al oído, abrazos fuertotes, besos tiernos, risas, películas, canciones, libros, parques, caricias, miradas infinitas, promesas dichas en voz alta, otras calladas... tantas y tantas cosas...
Y si queremos, si de verdad queremos... puede que todo no haya hecho más que empezar. Puede que todo sea mejor de lo que nunca soñamos. Cerrando algunas puertas, abriendo otras nuevas, nos encontraremos con muchos meses por nombrar, muchas cosas nuevas que vivir juntos, matices en la vida y en nosotros mismos por descubrir.
Juntos podemos. Y más de 365 dias después, aun te tiendo la mano, deseando que la tomes. Para ti.